El estar en casa por más tiempo supone, sin excepción alguna, un alza en nuestro recibo de electricidad. A veces por estar tan enfocados en la rutina de trabajo, se nos pasan detallitos sencillos que, unidos en conjunto, pueden generar una diferencia significativa en nuestro consumo diario de energía eléctrica y, por ende, también en nuestras emisiones de gases de efecto invernadero al medio ambiente; ¡sí! así es, esto tiene todo que ver, ya que para generar la energía eléctrica que consumimos, esta no siempre proviene de fuentes limpias y renovables… pero ese es otro tema que ya trataremos en un próximo artículo.
Entonces, no se trata únicamente de hacerlo para ahorrar para nosotros, sino que se trata también de llevarlo un poco más allá. Lo creas o no, hasta el hecho de tener tu correo electrónico saturado de remitencia que quizá ya leíste pero te resultó irrelevante, o tal vez nunca pienses leerlo, pero el hecho de no eliminar esa correspondencia de tu bandeja de entrada, si (por ejemplo) 5 millones de personas lo hacen así, definitivamente esto supone un incremento impresionante de espacio ocupado en los servidores de los diversos proveedores de correos electrónicos, lo cual, genera que sus plataformas físicas tengan que estar más activas y sean cada vez más grandes, por lo que así es, ¡hasta nuestro correo electrónico es causante de emisiones de CO2 al ambiente!
Regresemos al tema de la energía eléctrica mientras hacemos home office (también conocido como “teletrabajo”)
Te compartimos algunos tips muy sencillos para tomar en cuenta y lograr hacer una diferencia a nivel individual y colectivo.
– Aprovecha la luz natural para trabajar, abre las cortinas y disfruta la luz solar. Aparte de ser causa de ahorros, te hace muy bien estar más en contacto con la luz natural.
– Cierra las aplicaciones que no utilices, para alargar la duración de la batería de la laptop, la tablet y el celular. Esto evitará que las baterías tengan que ser cargadas continuamente.
– Comparte los espacios comunes para trabajar: si otros miembros de tu familia también se encuentran haciendo home office, utiliza los mismos espacios como la sala o el comedor, esto evitará que se enciendan luces de forma innecesaria.
– Desconecta todos los “cuadritos” de los cargadores de celulares y dispositivos móviles si no los estás ocupando.
– Organiza los horarios de tus tareas diarias para reducir el tiempo que invertirás en desarrollarlas, así como tus juntas o transmisiones en línea.
– Evita la procrastinación y realiza tus tareas sin muchas distracciones, de esta manera logramos disminuir el uso de la computadora u otros dispositivos.
– Despertar temprano y seguir la rutina habitual.
– Divide el tiempo de trabajo y de recreación en internet.
Ahorra energía en familia
Comparte en familia el entretenimiento; es mejor compartir un mismo televisor a que cada uno esté viendo algo distinto en diferentes dispositivos. Esto ayuda a disminuir el consumo eléctrico y a fomentar la convivencia.
Programa tiempo para utilizar tus aparatos eléctricos. Elaborar un horario para utilizar los aparatos eléctricos que no son indispensables, como consolas de videojuegos, televisores, sistemas de audio, entre otros. Esto impactará en la reducción del consumo de energía. Varios de ellos (los que siempre están en “stand by”) es mejor desconectarlos y no sólo apagarlos. Lo creas o no, siguen consumiendo electricidad.
Diviértete con juegos que no utilicen energía. Los juegos de mesa y otras actividades en grupo, mejoran la salud mental de la familia. Además, impacta en la salud psicosocial.
Apaga las luces que no utilices. Es una de las principales formas para ahorrar energía. Es importante que, todos los que habitan en la misma casa, la pongan en práctica.
Y por último pero no menos importante:
Si te es posible, ¡invierte en un sistema de luz solar para ahorrar al máximo!
Existen sistemas que no requieren de grandes baterías, e incluso algunos no requieren de baterías en lo absoluto. Quizás al inicio puedan ser algo costosos, pero realmente lo vale a nivel medioambiental y es muy redituable a un plazo no muy largo.
¡Feliz teletrabajo!
Equipo de investigación y editorial iNat México.
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