En las últimas décadas, el cambio de alimentación ha llevado a la población a llevar dietas desequilibradas, lo cual ha sido fuertemente asociado al desarrollo de sobrepeso y obesidad, aunado a esto, existen otros problemas relacionados como reacciones adversas a alimentos.
Las reacciones adversas a los alimentos son aquellas respuestas clínicamente anormales relacionadas con la ingesta o inhalación de un alimento, derivados o algún aditivo que contenga, el cual puede contener o no un componente inmunológico; un ejemplo de estas reacciones son las alergias e intolerancias alimentarias.
La intolerancia alimentaria es una respuesta clínica a un alimento en el cual no interviene el sistema inmune y puede existir una predisposición genética. Por otro lado, una alergia alimentaria es una reacción de gran sensibilidad donde se ve involucrado el sistema inmune.
Entre los signos y síntomas que se pueden presentar tras una alergia a algún alimento encontramos: náuseas, vómitos, dolor abdominal, diarrea, flatulencias, prurito, congestión nasal, broncoespasmo, asma, dermatitis atópica, urticaria, hipotensión, shock, paro cardiaco, entre otros. Estos pueden aparecer, incluso, con la ingestión de una dosis mínima del alimento. Existen casos en los que por medio del olfato se puede llegar a presentar una alergia.
Los signos y síntomas de una intolerancia son muy parecidos a los de una alergia, sin embargo, su aparición depende de la dosis consumida del alimento que lo genera. Un ejemplo común de intolerancia es la intolerancia a la lactosa, la cual es una reacción al azúcar de la leche que genera molestias gastrointestinales, pero muy rara vez evoluciona a consecuencias mortales o graves.
La intolerancia alimentaria son reacciones en las que el sistema inmune no se encuentra involucrado, por el contrario, a una alergia alimentaria en la que el sistema inmune reacciona y provoca algunas manifestaciones. En la alergia alimentaria se presentan síntomas como urticaria, congestión nasal e incluso un estado de shock, mientras que en la intolerancia los síntomas son parecidos, pero predominan los malestares gastrointestinales. Las reacciones del cuerpo van a depender de las dosis ingeridas del causante de la alergia o intolerancia. La mejor manera de evitar la aparición de los malestares es evitar el consumo de los alimentos que lo generan.
Equipo de investigación y editorial iNat México.
Referencias
Ruiz Sánchez, Jorge Gabriel, Palma Milla, Samara, Pelegrina Cortés, Beatriz, López Plaza, Bricia, Bermejo López, Laura María, & Gómez Candela, Carmen. (2018). Una visión global de las reacciones adversas a alimentos: alergia e intolerancia alimentaria. Nutrición Hospitalaria, 35(spe4), 102-108.
Valle Rodríguez, I., Huerta López, J. G., & Huerta Hernández, R. E. (2017). Alergia a alimentos. Alergia, asma e inmunología pediátricas, 26(1), 5-15.
Zugasti Murillo, A. (2009). Intolerancia alimentaria. Endocrinología y Nutrición, 56(5), 241-250.
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