Uno de los vegetales que mucha gente tiene complicaciones para cocinar, son las berenjenas, ya que es una verdura  que si no se cocina correctamente, tiende a desarrollar un sabor amargo poco agradable al paladar, este sabor amargo viene dado por la oxidación de los antioxidantes que se da una vez que entran en contacto con el aire, es decir, al cortarla. 

Sin embargo, retirarles ese sabor es sencillo. Una de las formas más utilizadas para hacerlo es cortarlas como se les va a utilizar, en este caso, en rodajas finas, colocarles sal, para que por efecto de ósmosis esos antioxidantes oxidados salgan con el agua y, posteriormente, lavarlas y secarlas un poco antes de cocinar. También se puede usar la técnica de blanqueado para los mismos efectos o bien procurar elegir berenjenas bien frescas para que su sabor amargo sea casi nulo.
Este es solo un ejemplo de los muchos usos que se le puede dar a este vegetal que tiene un sabor y una consistencia muy característicos capaces de transformar una simple ensalada en un platillo de restaurante, ¿la has probado?

Esperamos que disfrutes mucho esta receta. ¡Buen provecho!

Ingredientes:
2 berenjenas pequeñas
3 calabacines pequeños
2 cda de aceite de oliva
½ tz de cilantro fresco picado
1 cta de jugo de limón
1 cta de jugo de naranja
½ cta de pimienta molida

Procedimiento: 

Corta las berenjenas en rodajas finas, colócalas en un colador y agregales sal de mar. Mientras, con un pelador saque láminas muy finas de calabacín. Reserve.
Lava las berenjenas y seca ligeramente con papel de cocina. Úntale el aceite por ambos lados.
En un sartén o grill, a fuego medio alto, asarlas hasta que se doren ligeramente.
En un bowl coloque el jugo de limón y de naranja, aceite de oliva, cilantro y la pimienta y mezclar, agregar la berenjena asada y las láminas de calabacín y mezclar nuevamente para bañar los vegetales del aderezo.


¡Qué lo disfrutes! 

iNat Gastronomía.

 

 

 

 

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