Tipos de calabazas y usos en la cocina

¿Sabías que muchas calabazas son comestibles tanto crudas como cocinadas? Sin embargo, no deben consumirse si saben amargas.

Conocemos calabazas de muchos colores y formas diferentes. Entre las calabazas de invierno más populares encontramos la calabaza moscata, la calabaza Hokkaido o la calabaza muscat. La calabaza bonetera, un tipo de calabaza de verano también es muy popular. Muchas variedades de calabaza se pueden comer crudas.

Según la variedad, el sabor de la calabaza recuerda a los frutos secos o es más dulce, amargo o picante. Se recomienda precaución con las calabazas amargas. Estas no deberían consumirse ni crudas ni cocidas, ya que el amargor significa que contienen cucurbitacinas, sustancias amargas tóxicas. Además, al momento de comprarlas, deberá tener en cuenta el grado de madurez. Los ejemplares totalmente maduros garantizan el mejor aroma. 

El grado de madurez es fácil de apreciar por el color y el tamaño del ejemplar. Por ejemplo, la cáscara se vuelve más oscura conforme el fruto madura, aunque puede ser tanto lisa como tener hoyuelos: lo importante es que no tenga grietas. La pulpa de las variedades más pequeñas es, por lo general, menos fibrosa.

Si la calabaza suena hueca al darle un golpecito y mantiene intacto su tallo, aunque esté algo seco, es buena señal, ya que significa que la calabaza está madura. No compre calabazas sin tallo, pues es posible que las bacterias que causan la putrefacción se hayan introducido en el fruto.

Con las calabazas de otoño se pueden preparar numerosos platos populares, pero en verano también hay distintos tipos de calabaza que enriquecen nuestra dieta. El calabacín, que en realidad es un tipo de calabaza de verano, es buen ejemplo de ello.

Hokkaido: calabaza circular de color naranja brillante y de 0,5-3 kilos de peso. Cuando el fruto es fresco, se puede comer con cáscara, sino habrá que retirarla antes de consumirla. Es perfecta para preparar purés o para utilizarla como guarnición una vez horneada.

Moschata: calabaza alargada de color beige y de 1-3 kilos de peso. Tiene un sabor dulce y recuerda a los frutos secos, con una pulpa firme. Es especialmente adecuada para preparaciones al horno.

Sucrine du Berry: calabaza verde alargada con muy pocas semillas. Pesa 2-4 kilos. Es versátil y su cáscara lisa es muy sencilla de retirar.

Espagueti (squash): se denomina así porque, al cocerla, su pulpa recuerda a los espaguetis. La calabaza se prepara entera o cortada por la mitad, bien cocida en agua con sal o al horno. Después, la pulpa es muy fácil de extraer.

Muscat (Muscade de Provence): pesa entre 7 y 20 kilos, lo que suele ser demasiado para un hogar normal. Es deliciosa y tiene una pulpa muy bonita. Normalmente, se puede comprar en rodajas.

iNat Gastronomía. 

 



 

 

 

 

 

 

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